

La noche cubrĆa por completo Londres, era oscura, frĆa y sin una pizca de alegrĆa. El ministerio de magia habĆa cerrado ya, al parecer ni un alma habĆa en el, pasada la media noche habĆa concluido su horario, un espeso humo negro hace presencia en la ya conocida cĆ”mara de la muerte. Este humo recorre la profunda habitación hasta no encontrar seƱales de que alguien mas estuviera en ella.
Se acerca sin mas al centro de la misma, donde un arco destrozado, decorado con solo un manto hecho jirones cuelga de el agitƔndose ligeramente por una brisa indetectable.
El humo habĆa sido suplantado ahora por un hombre de largos cabellos, que con la Ćnfima luz brilla de tal manera que parecen blancos como la nieve. Esta persona, aun no reconocida, lleva lo que al parecer una tĆŗnica negra y elegante. De su bastón quita una empuƱadura en forma de serpiente y junto a ella una vara de madera. Apunta con esta al arco, y una voz arrastrada comienza a pronunciar unas bastas palabras
- Entia ab ultra ad vitam renovare - el arco comienza a precipitarse, halos de luz se dispersan por el lugar y al instante salen del mismo. Solo uno se mantiene frente a este hombre, una figura comienza a volverse corpórea, era alta, sin seƱales de cabello en su cabeza en su cabeza, sus Ćŗnicos rasgos faciales son sus ojos, dos surcos por nariz y sus labios. Este ser sonrĆe con malicia
- Ā” Vaya Lucius! - dice con una voz que suena a una serpiente
- la persona que menos me esperaba - Comenta con tono despectivo. El otro hombre conocido ya como Lucius realiza una exagerada reverencia.
- Mi Lord - su voz temblorosa a causa del miedo que le infunde la penetrante mirada del mago oscuro - He estado probando y probando para que su regreso sea rÔpido - Insiste, el hombre lo observa sin expresión alguna.
- Esa es tu obligación, aunque... tengo entendido que despuĆ©s de tu asquerosa huida has delatado a varios de los nuestros... - El rostro de Lucius se transformo de inmediato, el temor se hacia presente, su cuerpo temblaba; se preguntaba si habĆa hecho lo correcto en resucitar al mismĆsimo Lord Voldemort.
Lo que el nunca se imagino que en realidad habĆa resucitado a todos los asesinados desde el periodo de 1995 al corriente aƱo (1998) ya habĆan pasado tres meses de la Segunda Guerra MĆ”gica, en donde el mago mas poderoso de todos los tiempos fue derrotado por quien por muchos aƱos fue conocido como - El niƱo que sobrevivió - . Una guerra que se llevo consigo muchas muertes injustas como justas.
Mientras tanto al otro lado de Londres, Escocia, en la prestigioso Colegio conocido como Hogwarts de magia y hechicerĆa, una mujer de edad avanzada se encuentra en el despacho de lo que parece ser del director del mismo. Por una ventana un halo de luz azulado aparece un hombre alto, delgado, de nariz es muy larga y torcida, ataviado con una tĆŗnica que barre el suelo y un sombrero puntiagudo y de larga y plateada barba. La mujer emite un grito de sorpresa, y comienza a caminar en dirección de esta figura, con su varita en alto:
- Ā”Ah Profesora McGonagall! - Dice este, calmando a la mujer de Cabello negro y gafas cuadradas la cual aun no podĆa salir de su ensimismamiento -
- Si Minerva, estoy vivo, sorprendentemente, pero claro como todo hay una explicación lógica. Pero antes dĆ©jeme comentarle que... Lord Voldemort ha regresado, como asĆ tambiĆ©n cada uno de los que murieron antes y durante la segunda guerra mĆ”gica. Es necesario que reunamos a todos los ex alumnos y si usted esta de acuerdo claro... crear un ciclo de preparación para ellos-. El hombre ahora caminaba pasivo alrededor de la habitación, la mujer lo seguĆa volteaba cada vez que se le escapaba de su punto de vista. El hombre suelta una pequeƱa risa,
- Vaya Minerva parece ser que le comieron la lengua los ratones, vamos usted seguirÔ como directora e impartirÔ su clase como siempre, yo solo seré como su ayudante - Atusa su larga barba la cual estaba sujeta a su cinturón.
- Pero Albus - Dice con sorpresa Minerva - Āæesta usted seguro que Voldemort ha regresado? - En su rostro se notaba el asombro, el temor su mente pensaba que todo volverĆa a suceder otra vez.